lunes, 30 de julio de 2012
La pesadilla que viene....
Este es el negro destino que se abalanza sobre todos nosotros. Una nube negra cargada de personajes siniestros que han ganado (lease tranzeado) las elecciones y se disponen ya a mandar, organizar sus próximas trastadas, sus egresos; de a como no, de a como vamos a quedar... La siniestra historia de siempre, desde que Elias Calles delineó las directrices del naciente pri, pasando por una sarta de personajes que han abonado en décadas a la metódica aniquilación de las clases mas fragiles e indefensas de esta sociedad Mexicana y la asquerosa proliferación de riquezas obscenas que nos denigran al ser Mexicanos como ellos. Malditos apatridas como lopez porpillo, y michael du lamadrid (que se pudren en estos momentos gracias a Dios y sin peso alguno)...lacras deshumanizadas como lechebarria, diaz ordaz, y el nefasto de charlie ratalinas. Se dice que cada quien tiene lo que merece, pero estoy en desacuerdo, ya que miles de Mexicanos no hemos hecho nada mas que sobrevivir y aguantar esta triste realidad creada y derivada de tantas malas acciones de gentes quizas con pobres cocientes intelectuales o ignorantes que por pura casualidad nacieron en lugares privilegiados y que por angas o por mangas de golpe y zopetazo se convierten en verdugos de mas de cien millones de nosotros. Es todo esto como vivir una pesadilla que a diario se repite, que ya sabemos lo que sigue. Como una cruz a la cual estamos clavados y bien remachados, con miles de mosquitos picandonos a diestra y siniestra y sin manos para poder rascarnos. Los demonios andan sueltos, y han triunfado, tal y como lo lloró amargamente Ruiz Massieu. He leido muchas respuestas a quejas similares y todos dicen: Para que te quejas, mejor haz propuestas, haz algo. ¡Que mas quisieramos muchos! El carecer de amor por nuestras familias y nuestra vida misma y en un momento de locura magnifica gritar a los cuatro vientos: ¡Ya me cansé! Y tomar las armas. Pero, que es lo mejor que podemos hacer, nosotros como magdalenas siempre con el moco corrioso, pero sin un corazón valiente? Solo seguir quejandonos mientras no se nos aparezca un comando armado enviado por los jinetes del apocalipsis y nos calle para siempre. No tengo madera de martir, pero al menos siento alguna mini satisfacción al ver que mi queja ha sido leida por mas de dos.
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